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12/7/09

Mis letras más tristes

Mis letras más tristes siempre serán sobre ti.
Ayer, es un tiempo que ya se fue.
Hace 363 días que no te veo…
Y los segundos se siguen sumando.

Pero tu rostro no desaparece de mis ojos.
Aquí sigues siendo igual.
Tu sonrisa, tu olor,
Tus defectos y tus virtudes…

Abandonarte fue lo peor que he hecho,
Es la única cosa que jamás me perdonare.
El error más grande.

Tú ya me has perdonado,
Te conozco.
Pero eso solo me da consuelo.
Pero no me devuelve a ti.

Si tan solo pudiese volver el tiempo,
No sabes como deseo,
Volver atrás,
Si tan solo pudiese ser posible.

Volvería abrazarte,
y allí me quedaría.
A tu lado.

Hoy que lo comprendo,
No habría nadie,
Ni nada,
Por lo que yo te dejaría.

Pero es tarde, ya no puedo.
Estas más allá de lo que yo puedo llegar.
Lo que es valioso para mí, es tu recuerdo.
Y mis letras más tristes serán siempre sobre ti…

Mi pensamiento concreto

Ya fui traicionado, y no he muerto, es mas sigo creyendo más fuerte en la gente, porque no merece la pena perder el valor del amor por una mala alimaña.


Ya fui insultado, pero no tengo miedo a equivocarme, sigo adelante con mis convicciones, porque lo pero que podría pasar es luchar para ser aceptado a costa de lo que quiero ser.


Ya fui abandonado, pero aprendí que la soledad solo duele cuando se extraña a alguien, de lo contrario, la gente que esta en tu interior te acompaña siempre.


Ya fui ignorado, pero sigo hablando, pensando, haciendo, escribiendo… porque se que las ilusiones solo me pertenecen a mi.


Ya envejecí, no mucho, pero ya no soy tan joven. Y me he dado cuenta que el tiempo no es lo valioso, sino el valor que tenemos para reconocer los errores del pasado, las convicciones del presente y las acciones del futuro.


Ya sufrí, y estoy mas que seguro que el 90% de esas nubes negras que pasaron por mi mente fueron eso: imaginación, todo estuvo en mi mente.


Ya mentí, y no me siento orgulloso, porque pudo ser mejor, pude ser sincero, pero por cualquiera que sean las razones hice lo contrario. Así que me queda como reto la honestidad.


Mis errores son mi salvación, porque, puedo arrepentirme, sino, no fueran errores, fuera una forma de vida, todo lo vería normal, y estaría acabado.


Por eso cultivo a diario el pensamiento concreto, eso que me hace único, porque a través de él veo las cosas tal como son.