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24/12/09

Olvidando tu rostro

Hay muchas cosas que puedo evitar, pero no puedo dejar de olvidar tu rostro. Cada segundo que pasa olvido como eran esos rostros de la gente que yo amé.

Por eso cada vez que puedo cierro los ojos y trato de recordarte, se trata de una especie de promesa, con el paso del tiempo quiero tener más grabado tu rostro. no quiero perder esa risa de tu boca, ni esas cejas, ni el lunar de tu mejilla.

No quiero que la memoria me borre los mejores recuerdos, porque en cualquier pena me imagino tu cara, porque en ella veo todo lo que he vivido.

Cuando era pequeño pensé que estaría a tu lado toda la vida, pero uno crece y se da cuenta de esas cosas que hacen la edad adulta muy triste.

Nada es comprable con tu recuerdo. Quisiera que las escenas más bonitas, las canciones más hermosas y los amores fugaces que me dieron tanta emoción se pierdan de mi mente, menos tu rostro.

Con certeza absoluta.

La felicidad reside en hacer lo que se quiere, rodearse de la gente que uno ama y en vivir intensamente.

El compromiso de caminar junto a otra persona implica la aceptación de sus defectos, porque en sus peores momentos podemos comprender sus gran espíritu.

Los peores días de nuestras vidas no son cuando estamos tristes por lo largo que resulta a veces el camino, sino cuando no sabemos hacia dónde nos dirigimos.

Como dice Paulo Coelho, cuando el corazón ya ha llegado a un lugar, es más fácil que el cuerpo le siga. Por ello siempre debes llevar tu corazón y tus deseos hacia donde quieres llegar, porque esto trazará la ruta que deberás seguir.

21/12/09

Mi camino

Al inicio las bifurcaciones del camino hacían más difícil ver el destino, pero no perdía la ruta de mi dirección. Estos pasos eran la preparación para continuar la ruta –la ruta de la vida- porque antes de salir ya sabía hacia donde me dirigía.


Por eso cuando llegué no me impresionó lo que había conseguido, lo que había conquistado, incluso lo que había perdido, porque siempre estuvo esa imagen en mi mente el camino y el deseo de llegar. Y aunque llegue al final de la meta, pienso que debe haber un siguiente destino, y eso no es una forma de renegar, sino una forma de buscar mas, es una promesa de constancia.


Ese es mi placer, estar aquí, esperando a que mañana pueda estar más allá, más arriba, más adelante, o desde cualquier lugar donde pueda ver el pasado de una manera diferente, singular. Porque el aprendizaje en la vida también pasa por analizar los pasos que hemos dado cada cierto tiempo.


En ese camino pasé entre obstáculos, si mi camino fuese más fácil, no tendría sentido. A cada instante veo que la gente que inició ese camino ya no sigue, pero no se han perdido, siguen en otra dirección, siguiendo sus propios destinos, escribiendo su historia.

Hoy, después de tanto tiempo desde aquel ingenuo e inexperto inicio, se que llegar a un lugar no es un final, sino un inicio, donde cada quien se puede enamorar, tocar fondo, volver a empezar una relación con lo que le rodea.


Así mismo, se obtiene un aprendizaje: nunca podremos renunciar a nuestras decisiones, sin poner en peligro nuestras aspiraciones.


Ese es el camino mío y el de cada quien, porque todo viaje es un camino a casa.

9/12/09

Una noticia sobre las pérdidas

Estaba paseando por el jardín de la residencia para ancianos de Mckee, Leonor quien tenía unos 82 años, no tenía familia, así que le visitaba la mayoría de los sábados que me era posible y paseaba su silla de ruedas por los pasillos de concreto que hay por todo el jardín.

Le conté la triste noticia. Siempre he tratado de escucharle, después de todo no tiene nadie más con quien conversar, así que después de contarle lo sucedido dejé que se expresará, dijo unas cuantas verdades:

Como tratar de conectarme con todo lo que existe a modo de no irme de aquí sin probar todo cuanto hay, si pudiera tocar una rosa y decir que con ella he tocado todas las flores, posiblemente sería tan feliz.

Pero no es posible, no es posible tocar a mi mascota y pretender que he conocido a todos los animales de compañía, se necesita un poco mas de ambición para ser plenamente feliz. Se requiere mucha valentía para caminar y ver todo cuanto se pueda.
Así es como pienso, que todo es relativo y que así mismo como no podemos conectar con todo, cuando perdemos esas partes de nuestra vida, que creemos muy importante, en realidad no estamos perdiendo nada, es todo tan minúsculo.

El sentido de las cosas, de lo que queremos, de lo que tenemos y en lo que creemos, es el valor que nosotros le damos, nada más. Y eso en gran medida depende de la opinión que tengamos de nosotros mismos, por eso cuando carezcamos de la certeza de lo que una persona significa para nosotros, antes que a los motivos debemos acudir a la razón.

Así que cuando te despidas de alguien, te estás despidiendo de muy poco, porque lo que le hizo grande, importante e irremplazable son cosas y emociones que se quedan contigo.

8/12/09

Las putas, los políticos y los escritores.

Ya sé que las putas han inundado nuestras calles, que los periódicos se llenan de su oferta, siempre de “primera vez” y el cliente siempre vuelve, ansiando que esa nueva vez sea la primera vez.

Que nuestros políticos mienten siempre que pueden, y que quieren estar en el poder cuanto más tiempo les sea posible. Y siempre el elector vuelve, esperando que esta vez toda sea diferente.

Que el cambio climático para unos es un mito y a otros les mata, y que aunque no estemos seguros qué sucederá, el simple hecho que sea cierto, nos perturba un poco. Pero siempre reducimos la responsabilidad para el día siguiente, a la siguiente persona, porque no tenemos la valentía de asumir la nuestra.

Ya sé que las amistades no son para siempre, que cada quien tiene su forma de vivir la vida, y que cada uno debe seguir sus propios desafíos y enfrentar sus propios grados de dificultad y que el camino de esa lucha constante debemos transitarlo solos, porque es una cuestión personal, al final los amigos siempre han estado con nosotros.

Que a los escritores no les gusta Coelho, Brown, Rowling y Tolkien y todo aquel que tenga cómo sinónimo, la fama, las ventas y el éxito. Pero todos no se han puesto de acuerdo, si ese irreparable sensación de repudio es porque ha vendido mucho, lo que lo hace comercial, o porque ellos mismos no tienen el valor de escribir un buen libro para superar las ventas.

Al final sustentan sus sentimientos en que "ellos nacieron para escribir algo más profundo, más propio y menos lucrativo", lo que no saben es que para eso no deben ser escritores, sino apuntarse a una ONG, que por cierto no es una mala idea. Porque escritor no es el que más puro escribe, sino el que mejor cuenta.

Porque aunque las putas tuvieron su primera vez, los políticos ya alguna vez fueron jóvenes idealistas y buenos, los polos crecieron, lo que no me creo es que los escritores deban morir con una cruz en el pecho, como mártires.

Más bien, creo que hay buenas putas, buenos políticos, escritores y hay buenos escritores.