Ya fui traicionado, y no he muerto, es mas sigo creyendo más fuerte en la gente, porque no merece la pena perder el valor del amor por una mala alimaña.
Ya fui insultado, pero no tengo miedo a equivocarme, sigo adelante con mis convicciones, porque lo pero que podría pasar es luchar para ser aceptado a costa de lo que quiero ser.
Ya fui abandonado, pero aprendí que la soledad solo duele cuando se extraña a alguien, de lo contrario, la gente que esta en tu interior te acompaña siempre.
Ya fui ignorado, pero sigo hablando, pensando, haciendo, escribiendo… porque se que las ilusiones solo me pertenecen a mi.
Ya envejecí, no mucho, pero ya no soy tan joven. Y me he dado cuenta que el tiempo no es lo valioso, sino el valor que tenemos para reconocer los errores del pasado, las convicciones del presente y las acciones del futuro.
Ya sufrí, y estoy mas que seguro que el 90% de esas nubes negras que pasaron por mi mente fueron eso: imaginación, todo estuvo en mi mente.
Ya mentí, y no me siento orgulloso, porque pudo ser mejor, pude ser sincero, pero por cualquiera que sean las razones hice lo contrario. Así que me queda como reto la honestidad.
Mis errores son mi salvación, porque, puedo arrepentirme, sino, no fueran errores, fuera una forma de vida, todo lo vería normal, y estaría acabado.
Por eso cultivo a diario el pensamiento concreto, eso que me hace único, porque a través de él veo las cosas tal como son.
1 comentario:
Hola, la forma en q escribes es genial, t felicito
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